La figura de la enfermera prescriptora en España ha ido ganando importancia en los últimos años debido a los cambios en la legislación sanitaria y la necesidad de mejorar la eficiencia en la atención sanitaria.
En este artículo, explicaremos las funciones de la enfermera prescriptora, sus tipos y su situación en España.
¿Qué funciones tiene la enfermera prescriptora?
La enfermera prescriptora es una enfermera que tiene la capacidad de prescribir medicamentos y productos sanitarios. En España, esta capacidad fue adquirida por los profesionales de enfermería a través de la Orden SAS/1729/2010, de 29 de junio, que establece la regulación de la indicación, uso y autorización de dispensación de medicamentos y productos sanitarios de uso humano por parte de los enfermeros.
Esta orden reconoce a las enfermeras como profesionales capacitados para realizar acciones sanitarias en el ámbito de su competencia y con la finalidad de mejorar la atención al paciente.
En España, la enfermera prescriptora tiene competencias y habilidades específicas que le permiten llevar a cabo su trabajo de forma efectiva. Algunas de estas competencias son:
- Conocimientos sólidos de farmacología y terapéutica. Las enfermeras prescriptoras deben tener conocimientos sólidos de farmacología y terapéutica para poder evaluar la idoneidad de la prescripción de un medicamento.
- Habilidad para realizar una valoración integral del paciente. Deben ser capaces de realizar una valoración integral del paciente, incluyendo la identificación de necesidades, preferencias y características individuales del paciente.
- Capacidad para establecer un plan de cuidados personalizado. Las enfermeras prescriptoras deben ser capaces de establecer un plan de cuidados personalizado para cada paciente, basado en su valoración integral.
- Habilidad para identificar y evaluar efectos adversos y problemas relacionados con los medicamentos. Están capacitadas para identificar y evaluar efectos adversos y problemas relacionados con los medicamentos que puedan surgir durante el tratamiento del paciente.
Tipos de prescripción enfermera
La prescripción enfermera es una práctica cada vez más relevante en la atención sanitaria. En España, existen tres tipos de prescripción enfermera: la prescripción por protocolos y guías clínicas, la prescripción colaborativa y la prescripción independiente.
Prescripción por protocolos y guías clínicas en España
La prescripción por protocolos y guías clínicas es la forma de prescripción enfermera más común en España. Se trata de una prescripción que se realiza en base a protocolos y guías clínicas aprobadas por las autoridades sanitarias. Estos protocolos y guías establecen las intervenciones terapéuticas y de cuidado que se deben llevar a cabo en determinadas situaciones clínicas.
La prescripción por protocolos y guías clínicas es competencia del profesional de enfermería y no requiere la validación médica previa. Sin embargo, en caso de duda o de que el protocolo o guía clínica no contemple la situación concreta del paciente, el enfermero o enfermera debe consultar al médico responsable.
Prescripción colaborativa
La prescripción colaborativa se refiere a la prescripción que se realiza de forma conjunta entre el médico y el enfermero o enfermera. En este caso, el médico establece el diagnóstico y el tratamiento, y el enfermero lleva a cabo la administración del tratamiento.
La prescripción colaborativa requiere la validación médica previa y está limitada a determinados medicamentos y situaciones clínicas. Este tipo de prescripción se utiliza en situaciones en las que la colaboración entre médico y enfermero es necesaria para garantizar la seguridad del paciente.
Prescripción independiente
La prescripción independiente se refiere a la prescripción realizada exclusivamente por el enfermero o enfermera, sin necesidad de validación médica previa. Esta prescripción se limita a determinados medicamentos y situaciones clínicas, y requiere la formación específica del profesional de enfermería y la acreditación correspondiente por parte de las autoridades sanitarias.
La prescripción independiente se utiliza en situaciones en las que la enfermera tiene la capacidad y formación necesarias para realizar una intervención terapéutica de forma autónoma, sin la necesidad de consultar previamente al médico responsable. Esto permite una mayor agilidad en la toma de decisiones y en la atención sanitaria.
Situación de la enfermera prescriptora en España
En España, la capacidad de prescripción enfermera ha sido objeto de debate durante muchos años. La situación se ha ido regulando a través de diferentes normativas y leyes, y en la actualidad la enfermera prescriptora tiene un marco legal definido.
En 2015 se aprobó en España el Real Decreto 954/2015, que regula la indicación, uso y autorización de dispensación de medicamentos y productos sanitarios de uso humano por parte de los enfermeros y enfermeras. Este decreto establece las bases para la prescripción enfermera en el ámbito de la atención primaria y especializada.
Además, en el año 2019 se aprobó el Real Decreto-ley 29/2019, que modifica la Ley de Garantías y Uso Racional de los Medicamentos y Productos Sanitarios. Esta normativa reconoce la capacidad del profesional de enfermería para prescribir determinados medicamentos y productos sanitarios en el ámbito hospitalario.
La enfermera prescriptora es una figura importante en el sistema de salud español, ya que tienen competencias y habilidades específicas que les permiten llevar a cabo su trabajo de manera efectiva. Es importante que la formación de estos profesionales sanitarios sea adecuada y que se les reconozca y apoye en su trabajo dentro del sistema de salud.
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